"La muerte no existe, y con ese conocimiento, el miedo a ella también desaparece. Y recuerda: ni un solo humano que haya existido murió. Se convirtieron en luz y continúan existiendo como tales. El secreto es devolver esas partículas de luz a su estado original. Volviendo a una de las energías anteriores. Cristo y otros conocían ese secreto. Estaba buscando cómo preservar la energía humana. Es uno de los tipos de luz. En el Alma, a veces es igual a la suprema celestial. Luz. No la busqué para mí, sino para el bien de todos. Creo que mi descubrimiento hará la vida de las personas más fácil y tolerable y las encaminará hacia la espiritualidad y la moral.
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